Se acerca un buen día para meditar pero porque no hacerlo este año diferente, reconociendo todas aquellas cosas que quisiéramos cambiar pero que humanamente poco hemos podido lograr. Un familiar con un carácter difícil con el cual no encontramos la manera de acercarnos para conciliar, una herida que permanece abierta después de una separación o un divorcio, unos hijos lejos a quienes no hemos podido ver, una enfermedad o un defecto de carácter, en fin, todas esas cosas por las que todos alguna ves lloramos de impotencia. No quiero parecer religioso, es solo que una vez leí en la biblia que Jesucristo ofrece reposo a todo aquel que se halle trabajado y cargado. En un momento de verdadera angustia de mi vida yo creí en esas palabras y acudí en busca de ayuda. No se como, pero en verdad recibí reposo para mi alma. Hoy mi vida no es perfecta y aun hay muchas cosas que me hacen sufrir y otras tantas que deseo cambiar, pero cuando se ha experimentado un milagro en carne propia, se aprende verdaderamente a confiar en Dios. En lo personal yo quiero pedir para este año nuevo mas fe y más paciencia. Recordemos que Dios comienza a actuar cuando nuestros recursos ya se han agotado y que durante el proceso no estamos solos, su Santo Espíritu nos consuela, nos llena de fortaleza y nos enseña cada día.
Dios nos siga bendiciendo para este año 2013.